EEUU
1942
Marlene Dietrich, Fred MacMurray
Comedia
Sinopsis: Una actriz disparatada, secuestra a un bebé que habia sido encontrado abandonado por la policía. Se lo queda y cuando reacciona que tiene que hacer todo legal no le queda más remedio que casarse con quien sea para poder adoptarlo. Y se casa con el pediatra que ha atendido al niño de urgencia.
Valoración cinéfila 5/10
Valoración adopción 3/10
Disparate de película, que pretendiendo ser cómica, no puede entenderse hoy día.
Empezando por el personaje encarnado por Marlene Dietrich, una actriz descerebrada, que no sabe de nada, que confunde todo, inculta, egoista y superficial, pero pura pasión. Lo que le lleva a decidir quedarse con un niño robado, con la excusa que ha sido abandonado y ella llegó primero.
Se comporta como una snob de la maternidad, sin saber ni lo que se le echa a un biberón, ni cómo se viste a un bebé, pero eso sí, le diseña un parque de atracciones en su dormitorio, y hasta en él cantidades ingentes de dinero.
Por otro lado el marido que se busca para poder adoptar al niño, es otro medio lelo, que sólo entiende de ciencia, y que le aguanta todo por su belleza y por que es una mangoneante.
Al final parece que empiezan a enamorarse, pero sin sentido alguno, ni trama ni nada...por que lo decide el guionista. Y todos felices y contentos, después de haber llegado a la adopción , robando un niño y luego falsificando un matrimonio, para conseguir tamaño desafuero.
La película no es ni graciosa, ni tampoco tiene buenas actuaciones. Sí famosos actores.
Pero apunta datos históricos de cómo se entendía una adopción hace 75 años...como algo caprichoso (de ahí muy acertado el título en español de la película) y con unos estereotipos machistas increibles, y aún más en la consideración de la típica actriz bella pero idiota.
Desde el punto de vista de nuestros niños y niñas adoptados, mejor que ni la vean y en todo caso explicarles que el sentido del humor de hace tres cuartos de siglo, jugaba con la adopción de esta desgraciada manera y permitia decir que robar un niño, podía quedar impune, si la persona que lo hace es guapa, graciosa , pasional y medio idiota.Y que para ser buena madre sólo basta quererlo, sin tener en cuenta ninguna cualidad empática o cuidadora.
Básicamente eran películas para lucimiento de las actrices, pero con poco contenido ni realismo. De puro entretenimiento superficial.
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